Seguidores

jueves, 7 de febrero de 2019

               ¿Por qué mi hijo no atiende en clase?


Cuantos quebraderos de cabeza tenemos los padres con nuestros hijos y cuantas veces nos sentimos impotentes por no saber ayudarlos. La verdad... ¡Qué difícil ser padres! 
Una cosa es segura, de padres no nos podemos jubilar, con lo que si las cosas son de esta manera mejor nos ocupamos y dejamos de preocuparnos. Creo que será  más efectivo que  nos encomendemos a la tarea con música del dúo dinámico de fondo"RESISTIRÉ". 
Es que en la vida de nuestros hijos la aventura está asegurada y a veces con tempestades. Hoy nos llega la primera nota del profesor: el niño no atiende. ¡Qué horror! ya empiezan los problemas en el cole. Que si no hizo la tarea, que si molesta en clase, que si no para de hablar, que no hace nada, que si está en la adolescencia pensando en Dios sabe y un sin fin de posibilidades que nos asaltan en la cabeza. Pero lo cierto es, QUE EL NIÑO NO ATIENDE EN CLASE. A clase no podemos ir los padres a vigilar( eso sería de padre helicóptero que ya lo vimos en un post anterior). Entonces, pensemos. Pasa algo y hay que averiguar.
Existen muchas posibilidades por las que un niño no atiende en clase y cada caso es particular. En primer lugar deberíamos plantearnos si se aburren. Si el niño se aburre tendríamos que descartar la causa. En numerosos estudios un niño aburrido puede ser un niño de alta capacidad pero en contraposición puede ser también un niño con baja autoestima o con falta de motivación. Podemos empezar a recomponer la actitud del niño en el colegio pidiendo una tutoría (tenemos en la web www.hogarinfantil.net un pequeño vídeo sobre tutorías) y recoger información para contrastar. También debemos hablar con el niño y escucharle, sin presión y tratar de entender donde está la diana del asunto.
Puede ocurrir que el niño no atiende por hiperactividad o por déficit de atención, aunque a mi esta palabra no me gusta usarla, yo prefiero decir autocontrol, dispersión de pensamiento, concentración y capacidad de escucha. Creo con sinceridad que si aprendiéramos a trabajar en clase y en casa estos cuatro conceptos lograríamos muchas posibilidades con niños que en principio no son capaces de mantener una concentración relajada porque dicha concentración les produce presión.
La pregunta es ¿les podemos ayudar?. SÍ  y siempre sí. Hay que tener paciencia y enseñarles el camino. Ante la vida la capacidad de escucha nos da unas posibilidades importantísimas en nosotros y por ello igual que aprendemos a gestionar emociones,deberíamos aprender a manejar nuestro intelecto porque nunca olvidemos que nos arma como personas. Las personas que cultivan su mente, que siguen un reto por muy difícil que sea, aprenden a tener autoconfianza y ello lleva a manejar su inteligencia intrapersonal. Probablemente este post resume los puntos claves a tratar en niños que no atienden y que sin querer el sistema etiqueta para quedarse sin una posible solución.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Motivación- voluntad clave de éxito

Adiós pañal